TALLER PONTE EN FORMA LVO AL COLEGIO CHOZAS DE LA SIERRA
8-05-014/9-05-014
“TERAPIA DE CHOQUE”
.Al poco tiempo de enterarme de que había sido elegido para ir a un colegio a dar unas charlas a niños pequeños sobre qué es la epilepsia y cómo puede repercutir en una primera etapa infantil y en la adolescencia se me ocurrió una magnífica dinámica con sus respectivas variantes que llevé a cabo en los tres días que fui al colegio con diferentes grupos de edad cada día comprendidos entre los 8 y 10 años de edad.
.Mi idea era la de convertir la terapia en un juego donde el propio niño(elegido por mí, y que no tuviese epilepsia) pudiese por sí mismo darse cuenta de cómo puede llegar a sentirse una persona que tiene epilepsia en situaciones a las que no está acostumbrado. Según pasaron las charlas y observando que el método funcionaba, comencé con un juego en el que aplicaba problemas escolares como la falta de integración por tener epilepsia, caso omiso e incluso desprecio e insultos. Cada dinámica fue diferente pero con un mismo patrón, una terapia de choque que ayudase a los niños no acostumbrados a estar en éste tipo de compromisos, a ver lo que podían llegar a sentir niños con epilepsia. La dinámica trataba de elegir a 4 ó 5 niños que saldrían fuera de la clase para realizarla. Una vez fuera de la clase explicaba a los que están dentro qué debían hacer o cómo debían comportarse cuando entrasen los niños de nuevo. Para facilitar más la dinámica para sus esquemas mentales, les dije a cada mesa de qué tenían que hablar y que debían decir al niño que entraba, sólo el tema del que se hablaba. Mis dinámicas las aplique a:
1. No hacer caso, rechazo absoluto a la persona sin motivo alguno
2. Falta de respeto a la persona sin ningún motivo mediante insultos, palabras fuera de lugar, desprecio.
3. Burlas y risas provocando un rechazo a la persona.
..Al realizar la dinámica, se observó al instante como los niños empezaban a notar la falta de atención, el rechazo,…., por los demás. Sin entender muy bien el porqué de la situación. Es entonces cuando paré la dinámica. Saqué delante de toda la clase a los niños que habían sido elegidos para realizar la dinámica (niños con epilepsia), y les pregunté uno a uno delante de la clase de qué trataba el tema en su mesa y que tal se había sentido.
Al momento el niño/a observé que no comprendía el porqué del juego, porqué no le habían dejado hablar, porqué se habían estado riendo de él. Un GRAN PORQUÉ. Es entonces cuando les expliqué claramente toda la dinámica relacionada con la epilepsia. Pero para no centrar toda la dinámica a niños con epilepsia, comenté que éste tipo de problemas pueden suceder con niños y niñas con diferentes tipos de problema. Y que en la mayoría de los casos bajo mi punto de vista, los niños que se burlan y se meten con el más débil porque no se sabe defender, porque no tiene amigos que le respalden, ….puede llegar a ser porque el que tiene el verdadero problema es ése niño.
El día 9 de mayo realicé las mismas dinámicas. El efecto fue inmediato. Los niños eran mayores que los grupos de los primeros días, por lo que tenían más poder de reflexión. Así que decidí realizar unos pocos minutos a la dinámica de integración y más tiempo a la charla. Dejé que los niños participasen y comentasen sobre la integración y la epilepsia después de haberles explicado qué era y cómo afectaba en la vida social. Para que no pensasen que la epilepsia era el único gran problema que existe, resté importancia diciendo que otros dominan el deporte, otros las matemáticas, pero no por dominar menos algo, no por acordarte de una cosa o no, debes ser menos que los demás. Ó los demás no tienen porque burlarse o verle inferior. Cada uno tiene sus virtudes y sus defectos. Los niños lo comprendieron perfectamente.